Los anticuerpos antitiroglobulina corresponden a un examen para medir los anticuerpos contra una proteína llamada tiroglobulina, que se encuentra en las células de la tiroides.
Anticuerpo contra tiroglobulina
Se necesita una muestra de sangre. Para obtener información sobre la forma en que se hace esto, ver el artículo: venopunción.
Se le puede solicitar no comer ni beber nada durante varias horas antes del examen, generalmente durante la noche anterior. El médico puede vigilarlo o solicitarle que deje de tomar medicamentos que puedan afectar los resultados del examen hasta que pase el procedimiento.
Cuando se inserta la aguja para extraer la sangre, algunas personas sienten un dolor moderado, mientras que otras sólo sienten un pinchazo o sensación de picadura. Posteriormente, puede haber algo de sensación pulsátil.
Este examen ayuda a detectar posibles problemas de la tiroides. Los anticuerpos antitiroglobulina pueden llevar a la destrucción de la glándula tiroides y es más probable que aparezcan después de una lesión o hinchazón (inflamación) de dicha glándula.
Los anticuerpos antitiroglobulina también se miden. Algunas veces, también se mide el nivel de tiroglobulina, por ejemplo, para hacer seguimiento de algunos tipos de cáncer de tiroides.
Un examen negativo es normal y significa que no se encontraron anticuerpos contra la tiroglobulina en la sangre.
Los rangos de los valores normales pueden variar ligeramente entre laboratorios. Algunos laboratorios utilizan mediciones diferentes o analizan distintas muestras. Hable con el médico acerca del significado de los resultados específicos de su examen.
Un examen positivo significa que se encontraron anticuerpos antitiroglobulina en la sangre, lo cual puede deberse a:
Las mujeres embarazadas y los parientes de personas con tiroiditis autoinmunitaria también pueden resultar positivos para estos anticuerpos.
Las venas y las arterias varían de tamaño de un paciente a otro y de un lado del cuerpo a otro, razón por la cual obtener una muestra de sangre de algunas personas puede resultar más difícil que de otras.
Otros riesgos asociados con la extracción de sangre son leves, pero pueden ser:
Ladenson P, Kim M. Thyroid. In: Goldman L and Ausiello D, eds. Cecil Medicine. 23rd ed. Philadelphia, Pa: Saunders; 2007:chap 244.